Fue en el centro Cultural de la Ciencia, ante un auditorio colmado, se presentaron los avances de las investigaciones y técnicas en relación a este compuesto en el consumo y producción de alimentos.
Ante un auditorio completo, se llevó a cabo en el Centro Cultural de la Ciencia (C3), el Taller “Arsénico en el Agua”, organizado por la Red de Seguridad Alimentaria (RSA) del CONICET, en cual se expuso el informe realizado por el grupo ad hoc de la RSA, en donde se detallan tecnologías convencionales, no convencionales y en estudio para remover arsénico dentro de otros puntos de interés en esta problemática.
En la apertura del evento, el Dr. Miguel Laborde, vicepresidente de Asuntos Tecnológicos del Consejo, tomó la palabra y destacó “la actividad excelente que se está llevando a cabo en la Red de Seguridad Alimentaria, liderada por Carlos Van Gelderen, miembro del directorio del CONICET en representación del agro, que rápidamente captó la enorme potencialidad que tiene el Consejo y armó esta red que está teniendo un éxito notable”. Y agregó que “es un problema serio de la Argentina, y que atraviesa muchísimas disciplinas, es maravilloso que este evento haya congregado tanta cantidad de personas”.
Por su parte el Dr. Carlos van Gelderen, director de la RSA, consideró: “Desde que empezamos a trabajar con los distintos grupos, me sorprendió la cantidad de temas relacionados con Arsénico. Estamos bregando por que la Argentina sea un proveedor confiable de alimentos de consumo interno y externo. Este es un tema que tiene mucho que ver con la producción, por eso decidimos hacer este taller”.
En el comienzo de las ronda de presentaciones, la Dra. Marta Litter, investigadora superior del CONICET, en la Comisión Nacional de Energía Atómica, explicó la inquietud de la Comisión Nacional de Alimentos (CONAL) de poder contar con un relevamiento de tecnologías para remoción de arsénico en agua que derivó en la formación del Grupo ad-hoc ‘Arsénico en Agua’ dentro de la RSA. Además, presentó el informe final que concerta los objetivos del grupo: generar un ámbito de intercambio entre la ciencia y la gestión es el principal eje.
Seguidamente, el Dr. César Quintero presentó el siguiente grupo ad-hoc surgido de la RSA, por un pedido de Molinos Río de La Plata y Cámara Argentina de Comercio (COPAL), para la investigación de los límites máximos de arsénico en granos de arroz y las conclusiones en el análisis. “¿Por qué es importante en arroz? Porque se cultiva inundado durante 100 días, y en anoxia -falta de oxígeno-. Uno de los objetivos es dar una opinión científica para sortear problemas de límites que ocurren en el cuanto al comercio exterior y en la Argentina se consumen 20 grs por día por persona”.
A raíz de este trabajo se realizó el primer mapeo del contenido de arsénico inorgánico y orgánico en diferentes variedades de arroz pulido de toda la zona productora de arroz de la Argentina.
Sería muy importante que Argentina pueda introducir una modificación en el “Reglamento técnico Mercosur sobre límites máximos de contaminantes inorgánicos en alimentos”, respecto del contenido de arsénico en arroz, adoptando los criterios establecidos en la normativa CODEX, así como en el reglamento Comisión Europea (las cuales establecen un límite de iAs de 0.20 mg Kg-1 para arroz pulido en lugar de 0.30 mg Kg-1 de As total) de manera de poder adaptarse a las normativas internacionales.
También en cuanto al consumo de frutas el Dr. Juan Martín Oteiza, investigador adjunto del CONICET en el Centro de Investigaciones y Asistencia Técnica a la Industria (CIATI), abarcó las investigaciones de su grupo ad-hoc, que surgió de un pedido de parte del Ministerio de Agroindustria de la Nación, en el que concluyeron que en la actividad del valle del Río Negro, y la cuenca del río de mismo nombre, no se presentaron valores elevados de arsénico.
El Dr. Hugo Nicolli, investigador principal del CONICET, explicó el origen de este compuesto y su ocurrencia en los distintas partes de territorio nacional.
Un tema central de la jornada fue tratado en el apartado Arsénico y Salud, en el cual el Dr. Ariel Bardach, investigador adjunto del Consejo en el Centro de Investigación en Epidemiología y Salud Pública (CIESP, CONICET-IECS), abarcó los detalles de la principales efectos en la salud humana de una exposición prolongada a este compuesto. El Dr. Guillermo Grau, profesor adjunto de Toxicología en el Universidad de Buenos Aires, por su parte explicó sobre el Hidroarsenicismo Crónico Regional Argentino (HACRE), la enfermedad derivada de la exposición crónica al arsénico.
Por parte de la gestión institucional, el Ing. Jorge Durán de la secretaría de Infraestructura y Política Hídrica del Ministerio del Interior Obras Públicas y Vivienda de la Nación, especificó que desde la Dirección Nacional de Agua Potable y Saneamiento (DNAPyS), cuando se busca establecer una nueva norma “necesitamos que sea realista, flexible, exhaustiva, gradual, viva y estratégica”.
En el apartado Normativa y Salud, la Dra. Maria José Alzari, explicó los pormenores y complejidades del marco regulatorio y su impacto en la gestión institucional, entre otros detalles.
Las técnicas disponibles para la remoción de arsénico de agua, fueron presentadas por Ana Ingallinella (de la Universidad Nacional de Rosario), Lía Botto (del CEQUINOR, CONICET-UNLP), Sofía Frangie (INTI), Mónica Farfán (INIQUI, CONICET-UNSA), Fernando García Einschlag (del INIFTA, CONICET-UNLP) y Gonzalo Difeo (INTI).
En el cierre, el Dr. Van Gelderen, agradeció a los participantes su presencia y confío: “La posibilidad que tiene la Red es la abarcar el problema desde la interdisciplinariedad: poder juntar a distintos profesionales para solucionar este problema, no quedarnos solo con el diagnóstico. La posibilidad técnico científica de la Argentina es increíble y la podemos usar para solucionar problemas de todos los días”.